El día amaneció hoy en Sevilla con niebla. Como si de invierno se tratara, el cielo estaba cubierto y una ligera niebla que fue desapareciendo poco a poco. La temperatura era agradable, unos 20º C. La mañana invitaba a pasear y así lo hice. Después de un extenso recorrido por Triana, recorrí la Calle Betis, desde San Telmo al Altozano. Tomé algunas fotos de Sevilla desde Triana. Así se expresaría un Trianero castizo, matizando lo de Sevilla y Triana. Una vez en Madrid un trianero me dijo, Sevilla... Sevilla es lo mejor del mundo y Triana es lo mejor de Sevilla. Exaltación de la exageración manifiesta. Porque por desgracia, ni lo uno, ni lo otro. Aunque a nosotros nos parezca lo mejor... hay mucho trecho por andar. Pero el ombligo de Sevilla es así.
Y volviendo al tiempo, ahora cuando escribo esto para insertarlo en el blog, ya está el sol fuera y picando. Ya no está la mañana tan agradable como cuando paseaba. Ya tenemos los pies en el suelo. Adiós al momento agradable de la mañana.
Aqui vemos la Torre del Oro y barcos de recreo, espectáculos y restaurantes, atracados en la margen izquierda, lado de Sevilla.
En la otra margen destaca el Teatro Maestranza.
Sevilla desde el lado trianero. En el centro de la fotografía podemos ver la Puerta del Príncipe de la Real Maestranza de Caballería.
Margen derecha del Guadalquivir, en el lado de Triana.
Puente de Triana que une Sevilla con Triana
Aqui vemos la Torre del Oro y barcos de recreo, espectáculos y restaurantes, atracados en la margen izquierda, lado de Sevilla.
En la otra margen destaca el Teatro Maestranza.
Sevilla desde el lado trianero. En el centro de la fotografía podemos ver la Puerta del Príncipe de la Real Maestranza de Caballería.
Margen derecha del Guadalquivir, en el lado de Triana.
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