(Vehículo arrastrado por la tromba de agua)
La tarde de ayer sorprendió a todos con una fuerte tromba de agua en determinados puntos de la provincia y de la región. Si bien, de alguna manera esto se había venido anunciando previamente, lo que es probable es que no se pensara que fuera un cambio tan brusco.
Los municipios más afectados en la cornisa del Aljarafe fueron Tomares, Benacazón, Villanueva del Ariscal, Gines, Bormujos, Mairena del Aljarafe, San Juan del Aznalfarache, Sanlúcar la Mayor, Espartinas y Castilleja de la Cuesta que, entre las 18:00 y las 19:00, registraron un número elevado de incidencias, principalmente, anegaciones parciales en sótanos, garajes, locales comerciales, bajos de viviendas y carreteras secundarias. Sólo hubo daños materiales y no hubo que lamentar ningún herido.
La intensidad de las precipitaciones obligó también a cortar varias carreteras y Renfe tuvo que activar un plan alternativo de transporte para garantizar el servicio a los viajeros de la línea de media distancia Sevilla-Granada-Almería, y que se vio afectada en el tramo de las estaciones de Salinas y Antequera, donde los pasajeros tuvieron que ser transbordados por carretera debido a la inundación de la estación de Arhidona (Málaga).
Meteorología mantuvo ayer activa hasta las 21:00 la alerta naranja debido a las fuertes precipitaciones en la provincia, que llegaron a registrar 17 litros por metro cuadrado en la Sierra Norte, concretamente en el municipio de Cazalla de la Sierra. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) indicó que entre las 08:00 y las 20:00 de ayer los pluviometros del observatorio de San Pablo registraron hasta 4 litros por metro cuadrado. Valores similares se recogieron en la provincia, almacenando 4,7 litros en la estación de la base de Morón de la Frontera y 3,8 litros en Écija.
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