Recuerdo mi infancia con aquellas locomotoras negras y humeantes. Yo las clasificaba en tres clases: 1ª de chimenea corta (eran las grandes, para expresos y grandes mercancías), 2ª de chimenea media (eran algo mas pequeñas que la anteriores y normalmente se utilizaban para trayectos cortos o regionales) y 3ª de chimenea larga(eran las mas pequeñas y normalmente se utilizaban para maniobras). Así las clasificaba yo, y así nos entendíamos los amigos cuando hablábamos de trenes.
Cuanto se les debe aquellas locomotoras que con un silbato imponente llenaban todo de humo. A veces en algún que otro lugar, se recuerdan estas máquinas de vapor y se ponen en funcionamiento algunas reliquias que se conservan en buen uso. Y esto ya es significativo de lo que representaron en todos los países para su desarrollo. Lástima que estos eventos recordando el pasado ferroviario, se distancien tanto entre ellos. Además de que no todos los países suelen organizarlo. Cuanto nos alegra cuando vemos un reportaje o vídeo, de un lugar donde han sido capaces de poner en marcha aquellos monstruos de vapor y tirando de vagones de viajeros de todos los estilos. Porque en cuanto a vagones, también hubo una gran diversidad. Y también en ellos pudimos ir viendo como avanzaba el progreso y la comodidad del tren.
Afortunadamente existen organizaciones que en la medida de lo posible, -y lo suelen hacer bastante bien-, conservan material en muy buen estado para que podamos recordar y revivir aquellos años. Y para que las generaciones que nos siguieron puedan contemplar el avance que ha experimentado este medio de transporte.
Gracias a ellas y a estos vídeos podemos recordar aquellos viejos tiempos de las Locomotoras de Vapor.
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