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martes, 29 de diciembre de 2020

Ferrocarril de PUERTO NATALES a PUERTO BORIES

 




 Creía que iba a terminar el año, sin escribir algo relacionado con el Ferrocarril. En un principio, este era el principal tema que debía ocupar el blog. Al menos con esa intención lo inicié. Pero con el tiempo ha ido derivando y en el mismo he tratado otros temas que también me resultan interesantes. Y he creado otro exclusivo para temas ferroviarios.

Pero para terminar el año voy ha tratar sobre un pequeño ferrocarril que hubo en PUERTO NATALES, provincia de Magallanes. En el sur de Chile. Fue un pequeño ferrocarril de vía métrica y de 4,8 km de longitud. Construido en 1916, formaba parte del complejo Frigorífico Bories. Y trasladaba carga y pasajeros. El corto recorrido era el espacio que había entre PUERTO NATALES y PUERTO BORIES.    


El ferrocarril  fue clausurado en 1973, poco antes de que cerrara Frigorífico Bories. Aunque de poco recorrido, el tren funcionó con regularidad. Dando a la zona durante su funcionamiento cierta notoriedad. Y una vida de razonable bienestar para sus habitantes. Lo que nos demuestra, que un ferrocarril, allá donde se construía, regeneraba el lugar y potenciaba la calidad de vida y bienestar de la población. Fue uno de los escasos ferrocarriles que funcionaron en el sur de Chile.

(Fotos extraídas de WIKIPEDIA)

viernes, 25 de diciembre de 2020

LEER LA HISTORIA CON SEGURIDAD

   Leyendo sobre los descubrimientos, viajes, expediciones, incursiones, aventuras, y todo cuanto de España se ha escrito, desde el primer viaje de Cristobal Colón (1492-siglo XV), no paramos de encontrar auténticas realidades, que por el tiempo transcurrido, nos pueden parecer inverosímiles. Algo importante, al leer cuanto aconteció   entre los siglos (XV al XX), es contrastar lo que leemos. Claro, que esto se nos antoja harto complicado. Y es fácil de entender. Si hay algo sobre lo que se ha vertido mucha tinta y gastado mucho papel, ha sido en contar la historia. Pero qué historia ¿?. La verdadera, la intencionada, la adulterada, la interesada según qué cosas, la particular de cada cual, o la que interesa contar según para qué. Lo dicho, muy complicado encontrar un criterio único sobre los acontecimientos de aquellos tiempos. Y por qué ¿?. Pues porque la historia se cuenta según los criterios que el autor tiene. En el mayor de los casos, están muy bien estudiados y contrastados. Y en otros, que no son pocos, nada reales y mucho menos contrastados. Si bien, afortunadamente el tiempo transcurrido en esos siglos, sí está muy contrastado y muy bien definido a nivel internacional. Reconocido por Instituciones internacionales que los garantizan y respaldan. 


  Con el tiempo y ahora mas que que nunca, con motivos de celebraciones y aniversarios, de muchos de aquellos acontecimientos que se vienen celebrando desde el Siglo XX. Nos encontramos con multitud de libros, novelas, anotaciones y escritos en general, que nos hablan de aquellos viajes y descubrimientos y de todo cuanto les rodeó.  Narrando hechos acaecidos y añadiendo en muchos de ellos, una aportación novelística. Aventuras de algunos momentos concretos. Personajes que fueron importantes por la labor que desempeñaron. Y leyendo la historia nos podemos encontrar todo lo imaginable. Y lo no imaginable también. Ahora con Internet, tenemos una ventana abierta a todo y a todos. Y es ahora, cuando hay que contrastar más lo que nos llega. La historia nos puede llegar distorsionada, según su procedencia. Por eso, si queremos conocer con verdadera exactitud un hecho histórico, además de consultar INTERNET, no estaría nada mal consultar un libro de edición conocida y con años de publicación. De esta manera, podemos tener mas seguridad sobre lo que nos pueda interesar. Extrayendo su contenido de un medio, que ya está contrastado por el tiempo y por los historiadores.


Esto no quiere decir que no utilicemos Internet. Claro que no, lo que ocurre y es fácil de entender, es que la  manipulación la puede ejerce cualquiera con suma facilidad. Ocurre que en todo cuanto se cuenta y se ha escrito de los siglos XV al XX, encontramos -hablo en mi caso particular- discrepancias con determinados personajes y determinadas fechas. Así mismo en la descripción de lugares, por ejemplo, en algunos casos son citados o situados en puntos muy distintos. Con una grosera diferencia entre uno y otro tratándose del mismo lugar. Y a veces, lo que suele ocurrir es la no coincidencia de fechas del mismo acontecimiento.


Esto, nos puede llevar a no tener plena seguridad, en determinamos momentos sobre lo que estamos leyendo, o queremos conocer. Por ejemplo, si en un escrito citan un lugar o un hecho, determinado y lo acompañan con unas coordenadas del lugar, el lector puede -yo al menos los suelo hacer- comprobar esas coordenadas. Y que ocurre cuando la discrepancia entre una y otra difieren ostensiblemente, pues que el lector queda descolocado. No sabe si el error se debe a imprenta, o a una información mal tomada. Algunos de ellos se han podido ver. Y en ese caso la veracidad del hecho queda en el aire.

(Ilustraciones extraídas de Internet)