TECLEANDO

 

A veces por aburrimiento, otras por matar el tiempo, con frecuencia por afición y la más de las veces porque me da la gana. Decido escribir algo. Qué, nunca lo sé. Nunca se a ciencia cierta qué voy a teclear, lo que, si es recio e innegable, es que me gusta teclear. Desde pequeñito he aporreado teclas en una Olimpia, Remington u Olivetti. Mi padre, para tenerme distraído, metía un folio en alguna de ellas y me dejaba teclear, recomendándome siempre que no golpeara muy fuerte. Bueno, a los catorce años ya tenía en casa una Olivetti Pluma 22. Que todavía conservo en muy buen estado y útil. La misma la tuve durante diez años usándola a mi antojo en Madrid. Y hacía milagros con ella. ¡¡Ay!!, si estos teclados que tenemos ahora los hubiera conocido entonces. La de cosas que desde los setenta hasta nuestros días hemos conocido y muchas de ellas ya son antiguas y forman parte del pasado. Hasta el extremo que ya te lo piensas cuando compras algo nuevo. Te preguntas, cuánto durará esto en el mercado ¿?.

Y todo esto para justificar que me gusta teclear. Hoy he pensado en los últimos acontecimientos personales. Tras una pandemia que los de mi edad y mayores nunca habíamos conocido, parece que volvemos a la normalidad. Ya se anuncia el final de las mascarillas. Luego esto parece ir en serio. Dejamos atrás la pandemia ¿? y sin despistarnos mucho han pasado ya dos años. Como han sido estos dos años. Cada cual lo puede contar a su manera y según lo haya podido mediar.

En lo personal para este aporreador de teclados han sido algo ominoso. De batimiento entre la comodidad y la incomodidad. Entre lo bueno y lo no tan bueno. Entre la cama propia y otra ajena. Entre lo adverso y lo favorable. Entre la esperanza y la desesperanza. Entre el salón de casa y las salas de esperas. Entre la comida casera y la otra que no gustaba porque no le ponían sal. Entre…..y…..

Entre Pinto y Valdemoro, se pasaron dos años y parece que el camino continua. Esperemos que por un lado la experiencia alcanzada, porque algo se ha aprendido y retenido y por otro el optimismo y la suerte, nos lleven a Buen Fin.

Y seguiremos tecleando, seguro que sí. Y en el tecleo espero dejar impreso otras cuestiones que momentáneamente están aparcadas. Por ahora no se cuando aporrearé teclas de nuevo. De momento se que por unos días tengo que dejarlo. Espero volver pronto. Y estoy seguro que nadie lo tomará como una amenaza, porque los que puedan conocer esto son asiduos/as y complacientes.

Relato personal

Basílica Sta. Lucia del Trampal

Desde la ultima vez que aparecí por el blog ha pasado algún tiempo. Hoy vuelvo a meterme en él para distraerme un poco sin tener previsto siquiera que voy a escribir, o sobre qué voy a teclear. Pero ya ira saliendo algo, porque la verdad siempre hay de qué hablar. Podría hablar de lo personal, al fin y al cabo solo entro en esto para entretenerme y en lo personal hay mucho de que hablar. Puedo hacer de mí mismo, una recapitulación de lo que fue el año 2022 en lo personal.  Fue un buen año para mi ¿?. Pues precisamente porque no lo fue, es por lo que voy a hablar de él y referir el año en mí y a mí vida personal. Entonces, se podría decir que fue un año desgraciado, NO, solo fue un año bastante desafortunado en cuanto a la salud. Sin entrar en detalles, porque no es eso lo que pretendo. Diré que a lo largo del año visité el quirófano en cuatro ocasiones, a urgencias otras cuatro, en UCI ingresado en dos y días hospitalizado algo así como cuarenta y tres días. No está mal para un solo año. Y no cuento las consultas médicas habidas, ni las hora pasadas en salas de esperas. Para qué referirlas si eso se puede suponer.

Castillo de FRIAS (Burgos)

Se puede decir que todo el periplo médico se empezó a fraguar en enero del 22. Se manifestó en febrero y continuó mas o menos con alguna alternancia durante todo el año. Y por si todo esto fuera poco, hubo un respiro al final del año que se iba y principio del que llegaba. Para ya en enero del presente empezar un nuevo episodio, que había en reserva, manifestándose bruscamente en enero. Dando lugar a una continuación de lo acontecido en el año anterior, aunque eso sí, con novedades de otra índole. Iniciándose una nueva apertura, con la novedad que permaneció mucho tiempo en la reserva, sin que se manifestara fehacientemente. La rapidez en acudir a los galenos y la reacción eficaz de éstos, hizo posible que siguiera adelante, salvando el imprevisto bache de ultima hora. Nueva UCI y nueva hospitalización. Todo ha quedado atrás después de casi dos meses de batas blanca y uniformes verdes.

Tras este periplo relatado y después de haber tenido horas, en que por la cabeza pasó de todo. Desde recuerdos de la infancia, hasta los mas recientes. Trato de poner un poco de orden en la cabeza. Sin duda desde un principio y a pesar de los malos momentos que acontecieron, permanecí ignorante de los distintos momentos atravesados. De lo cual casi me alegro, porque tal vez mi reacción hubiera sido otra, si llego a conocer todo lo que estaba pasando y la importancia que en todo momento daban a mi estado. Mientras yo permanecía ignorante. Solo era consciente de que a mí me pasaba algo. Y el mal en si pudo causar una septicemia. Gracias a que un Doctor se percató y supo exactamente qué pasaba en el  interior. Cortando por lo sano y nunca mejor dicho de de cortar. 

BAELO CLAUDIA  (Tarifa)

Volver a ser el mismo es difícil. Ahora algunas limitaciones me obligan a otra forma de actuar. Pero para nada son impedimentos de gran importancia. A todo lo pasado quiero extraerle lo más positivo. Y lo mas positivo sin duda ha sido, la eficacia con que se actuó una vez detectado el problema, Otra fue la constante dedicación, que los profesionales dedicaron en todo momento a atender el problema. Con un trato muy de agradecer y magnifica profesionalidad. Sobre todo en las unidades de UCI y en la  hospitalización. Eso por la parte profesional. En la parte personal agradecer a mis amigos el constante interés que en todo momento mostraron por mi. Algo que no me ha extrañado porque los conozco bien a todos desde hace mas de cincuenta años. Han sabido respetar mi deseo de no ser visitado. Mi pensamiento respecto al enfermo hospitalizado, según los casos, es la de dejarlos tranquilos mientras estén en el hospital. Y como es mi modo de pensar así lo hice saber. Por supuesto en ningún momento me faltó el apoyo y ánimo de todos y cada uno de ellos. Cerca tuve siempre a la familia. Especialmente a mi esposa, quien estuvo en todo momento al lado y pendiente de lo más mínimo. No podía pedir más. Solo que aquello pasara cuanto antes. Y pasó ¿?, de momento parece ser que hay una tregua. Tengo confianza y pienso que lo que es mejorar, ha mejorado bastante. Y así las cosas, todo marcha con optimismo.

Castillo y Puente de Medellín

El pasado 2022, como todos los años tuvo sus cosas. Y según se miren así las calificamos, pero en general para mí y para mi entorno lo mejor es que pasó. Llevándose más de lo que podíamos imaginar. Y aquí voy a terminar. Porque pretendía entretenerme un rato con lo que me viniera a la mente. Y están acudiendo algunas cosas que no quiero reflejar. El optimismo mío y de mi entorno se ha reforzado y así me gustaría que continuara. En mí y en ellos.

En esto que escribo a vuela pluma, no he reflejado todo lo que debiera haber cumplido en el pasado año. En la agenda teníamos mi amigo y yo, unos proyectos de viajes y visitas programados que han quedado inéditos de momento. De los que me gustaría hablar si por fin podemos hacerlos realidad. Y en ello estamos. Viendo con optimismo como en parte se pueden completar las visitas programadas. Una de ellas es un empeño personal, en visitar la Basílica Visigótica de Santa Lucía del Trampal. Doscientos veinticinco kilómetros (225) la separan de nosotros, pero se puede ir y volver en el el día, Apuntada queda. Otro empeño es visitar el gran enclave histórico de Medellín. El cual estuvo en mis manos el verano pasado, ya que estuve en él para ver un espectáculo en el Teatro Romano. Sin embargo el terrorífico calor con que fuimos obsequiados todos en este Continente, impidió que la visita se efectuase en condiciones normales. Dejándola para mejor ocasión. Y la mejor ocasión esperamos se presente en el año actual. Completando la Agenda en todo lo posible.

Se trataba de un pequeño entretenimiento y hasta aquí he llegado. Al menos me ha servido para reemprender el blog, que había quedado un tanto olvidado. La próxima aparición espero sea pronto. Vamos a ello.   

Fotos extraídas de Internet

VISITAS PROGRAMADAS: Basílica Sta. Mª del Trampal; Castillo de Frías; Baelo Claudia; Zona Monumental de                                                             Medellín

MEDELLIN, sigue esperando

Llegó el momento de nuevo, claro tenía que llegar. Era ya mucho tiempo de ausencia. Y si bien había impedimentos, que no me indicaban el camino ideal, por el contrario si existían los que no me llevaban al camino de ninguna manera. Aún hoy hay piedras en el camino que tengo que sortear, a veces con mucha dificultad. En la manera de lo posible iremos limpiando el camino a ver si dejamos de encontrarnos dificultades en él.

Lo ultimo fue MEDELLIN, con una muy buena interpretación teatral, como todas las del "El Brujo". No cabe duda que el fuerte calor que soportamos por aquellos días, pudo ser parte las piedras del camino por que desde entonces vengo andando. MEDELLIN.

Por tanto sigue  siendo una asignatura pendiente. El bello y bien conservado Patrimonio de la ciudad sigue pendiente de una visita, que en aquella fecha tuvimos que posponer. Ahora una visita como la que se había planificado queda menos probable de realizar en breve. Pero sigue estando en la Agenda.