El miércoles 28 del ya atrás, mes de octubre, era día de salida. Las circunstancia que nos rodean, debido a esta Pandemia, nos obliga a tener en cuenta una serie de normas, impuestas para tratar de frenar y disminuir el efecto maligno del dichoso virus. Por eso también en esta ocasión decidimos no hacer kilómetros y quedarnos en la ciudad. Era lo más aconsejable. Y optamos por visitar la Casa de las Ciencias, en el Pabellón de Perú. Aunque ya era conocida, siempre es agradable repetir. En líneas generales está muy bien. Pero Sevilla merece tener una Museo de las Ciencias de más significado y prestancia. Claro que el lugar donde se encuentra en la actualidad, no permite una ampliación adecuada. Y el edificio, que ya es una auténtica joya de la Exposición del 29, esta compartido con el Consulado de Perú –que siempre estuvo allí- nos permite recrearnos no solo en lo allí expuesto por parte del CSIC. Además podemos admirar el interior, o al menos una buena parte de él.
También la salida del miércoles, nos sirvió para pasear por una zona, muy frecuentada por mí en mis años de bachillerato. En el Pabellón de Chile, justo al lado, en los años sesenta estaba provisionalmente el Instituto San Isidoro. En él estuve algunos años. Otra joya del 29, que pudimos ver por dentro. Aunque por motivos del momento no estaba permitida la visita. Pero los de seguridad, fueron muy amables y nos dejaron ver algo mientras conversábamos con ellos. Después fuimos a la muy visitada y siempre agradable Plaza de España. Sorprendiéndonos que pese a la situación actual, pudiéramos observa un buen número de turistas. Tanto a pie, cámara en ristre, como montados en coches de caballos. La Plaza como siempre, bellísima. Paseo por el Parque en un otoño triste, en el que la caída de la hoja no revestía la belleza de la estación.
Fue una mañana tranquila, en la que pudimos hablar sobre lo que ya estamos viviendo. Por ello, en los días en que no podamos salir de nuestro territorio y nos veamos obligados al “ostracismo”, aprovecharemos para ver otros lugares y planear nuevas salidas. En la confianza de que pronto podamos realizarlas.
Fotos: JOSE LUIS PEREZ y PPCALL
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