El tiempo en Sevilla

-*-*-*-*-*- futbol */*/*/*/*/ contador de visitas <.<.<.<.<.<.<.<.

martes, 16 de marzo de 2010

El hombre, o la mujer del Tiempo.


Antes, allá por la década de los sesenta, cuando la TV era en blanco y negro y solo había una cadena ¿recordáis?, los que pasen o ronden los sesenta años sin duda lo recordarán. Pues bien, entonces en aquella TV en blanco y negro, había un hombre del tiempo. Recuerdo que se anunciaba el espacio de la información del tiempo, con una carta en la que se dibujaban unas isobaras y sonaba una música, que era como un silbido y que todos conocíamos y silbábamos. En la pantalla veíamos una mano que sujetando un punzón se movía de un lado a otro señalándonos algo en las isobaras que nosotros no terminábamos de entender. Al mismo tiempo el movimiento de la mano y el punzón, iba acompañado de una voz que nos resultaba muy familiar, pero que no sabíamos de quien era. Bueno, si sabíamos de quien era la voz, lo que pasa es que nunca le veíamos la cara. Al hombre del tiempo en aquellos primeros años de la TV no le veíamos la cara. Sabíamos que se llamaba Mariano Medina, pero no lo conocíamos. Circuló el dicho "es mas difícil que verle la cara al hombre del tiempo" . Algunos decían que no se le veía la cara, porque como se equivocaba tanto, de esta manera se impedía que la gente la tomara con él. Lo cierto es que no conocimos al hombre del tiempo hasta algunos años después. Y por fin conocimos a Mariano Medina. Las predicciones de antes eran como eran y acertaban y erraban, igual que ahora. La verdad es que habría que ver los medios con los que entonces contaban los que a este menester se dedicaban. Por supuesto que se equivocaban, pero no pasaba nada. La verdad es que los errores o equivocaciones del hombre del tiempo, solo se empleaban para la broma o el chiste. Hoy es distinto. Hoy no solo está el hombre del tiempo, están los hombres del tiempo y las mujeres del tiempo. Y por si esto fuera poco están los colaboradores, las estaciones privadas, observatorios de centros industriales y comerciales, las páginas de internet, la prensa, la radio y un buen número de cadenas televisivas. Hoy tenemos una extensa información, muy efectiva, certera y precisa. Teniendo en cuenta que la meteorología, aunque apoyada en la física y las matemáticas, todavía no es una ciencia exacta. Por lo que naturalmente hay errores e informaciones que a posteriori difieren de la anunciada en un principio. Pero de lo que no cabe duda es del avance que ha tenido en los últimos veinte años. Las previsiones son precisas en tiempo y forma, con márgenes de error perfectamente razonables.
Sin duda en estos últimos años en el terreno de la Meteorología, lo que mas ha dado que hablar y mas ha influido en la opinión pública, han sido las Nevadas. Las recientes nevadas habidas en España. Y es que aunque en todo momento fueron anunciadas, nunca se puede precisar la intensidad exacta con que el fenómeno puede presentarse. Mas que falta de predicción, ha sido falta de previsión. Los meteorólogos anunciaban la nevada y la intensidad con que se podía presentar. Y daban algunos consejos y recomendaciones. Y eran las autoridades las responsables de notificar a la población las medidas a tomar, con recomendaciones a las que no siempre hacíamos caso, tal vez dejándonos llevar por la posibilidad de que fueran algo exagerados los pronósticos. Y así nos hemos encontrado bloqueados en carreteras y autopistas durante horas y sin posibilidad de encontrar una solución inmediata al problema. Claro que si nos ponemos a pensar y comparar la cantidad de personas que se ponían en movimiento un puente o fin de semana en los sesenta, o setenta, y las que nos ponemos en movimiento ahora, comprenderemos que el problema viene dado por la movilidad de la que disponemos. El tiempo, sigue actuando mas o menos como entonces. O no nos acordamos ya de cuando daban los partes en Radio Nacional en los meses de invierno y al final del mismo nos recitaban la lista de puertos, cerrados y abiertos con cadenas. Que ahí era donde aprendíamos geografía de España, o al menos sabíamos con certeza, donde estaban los principales puertos de montaña, tanto la provincia, como el sistema montañoso.
La meteorología ha cambiado mucho y también nosotros. Pero... nos hemos adaptado perfectamente, o tal vez no hemos terminado de encajar el avance.
Jocama,16/03/10

No hay comentarios:

Publicar un comentario